Por Jose Antonio Ruiz Castillo

Pongámonos en contexto: 31 de diciembre del año… bueno, de cualquier año, la cuestión de la que vamos a hablar es atemporal, tras las doce uvas, ¿quién no se ha propuesto como objetivo para el gran año ir al gimnasio, adelgazar o empezar a correr? ¡Genial! Objetivo establecido para el año, ahora bien, es muy probable que al menos el 90% de estas personas no llegan a Febrero cumpliendo el plan necesario para alcanzar su objetivo. Fracasan y se frustran, llegando a abandonarlo por completo. Esto es porque cuando vemos que nuestros cambios no tienen un resultado visible a corto plazo tendemos a desmotivarnos y abandonarlos.

¿Conoces la estrategia SMART?

En 1981 George T. Doran crea esta estrategia que nos permite alcanzar los objetivos de una forma inteligente, más adelante hablaremos en profundidad de ésta, primero hablemos de qué son los objetivos y para qué sirven.

¿Qué son los objetivos?

Los objetivos son metas que queremos alcanzar, cualquier cosa que deseamos lograr es un objetivo, por lo tanto desde el aspecto más pequeño, mejorar mi flick, hasta el aspecto más grande que puedas soñar lo puedes llamar objetivo y trabajar sobre él.

¿Para qué sirven los objetivos?

“No hay viento favorable para el que no sabe adonde va” (Séneca)

La función principal es guiar. No tener objetivo es como navegar en el mar sin brújula, estás aplicando tus esfuerzos pero no sabes hacia qué dirección, lo que puede llevar a que realices esfuerzos en direcciones contrarias, sin avanzar, pudiendo incluso retroceder y llegando a la frustración. 

La segunda función o aspecto que nos aporta tener un objetivo es la motivación, el simple hecho de establecer un plan con una meta que alcanzar, aumenta la motivación personal hacia la tarea que estamos realizando.

Estrategia SMART

Sigue estos sencillos pasos a la hora de crear con tu equipo o tú mismo los próximos objetivos a cumplir. Nos permite alcanzar los objetivos fijados de una forma inteligente, pudiendo guiar nuestros esfuerzos, evaluar constantemente nuestra evolución y realizar cambios o mejoras del plan establecido. 

El nombre de la estrategia corresponde a sus siglas en inglés:

• S-Específico (Specific): los objetivos deben plantearse siempre de la forma más detallada y concreta posible, planteándose siempre de forma positiva.
• M-Medible (Measurable): los objetivos deben ser medibles. El poder medir el trabajo que estamos haciendo nos hace tener más control sobre ello y además nos permite evaluar el avance que estamos teniendo, pudiendo intervenir cambiando el plan si no es el adecuado.

• A-Alcanzable (Attainable): el objetivo no debe ser ni demasiado fácil ni demasiado difícil, ya que nos aburriremos o por el contrario la tarea nos frustrara.

• R-Relevante (Relevant): la meta planteada debe ser relevante para que la motivación siempre esté ahí. Si un objetivo es importante para ti, la adherencia a realizar la tarea será mayor.
• T-Temporales (Timely): el objetivo tiene que tener una fecha final. Puede ser un factor de dificultad añadido, por lo que tenemos que ser realistas y adecuarlo a nuestros recursos.

Ejemplo de errores al plantear los objetivos en el hockey

“El objetivo para este año es ganar el campeonato”. Si bien no es un mal objetivo, es demasiado general, deberíamos descomponer este objetivo tan general en objetivos más pequeños y específicos, centrándonos en cada uno de ellos, por ejemplo: “conceder menos penalti córner”, “ nuestra efectividad en el penalti córner debe aumentar”, “mejorar la defensa en el mediocampo”.

Algo importante a tener en cuenta es que debemos seleccionar pocos objetivos al mismo tiempo. Una vez seleccionado aquel objetivo en el que nos vayamos a centrar, debemos aplicar la estrategía SMART. Siendo ya específico, debemos hacerlo medible, convirtiendo “ nuestra efectividad en el penalti córner debe aumentar” a “aumentar un 30% nuestra efectividad en el penalti córner”. 

El tercer paso sería comprobar si es alcanzable. Pues es posible que el objetivo esté bien planteado pero no sea alcanzable, por ejemplo, si no disponemos de ningún tirador de penalti córner, el objetivo no estaría bien planteado. 

En cuarto lugar, ¿es este objetivo que hemos planteado relevante para mí y el equipo? Sí, adelante, continúa hasta el quinto y último eslabón de la estrategia, hacerlo temporal, “debemos mejorar un 30% nuestra efectividad en el PC en el campeonato regional del próximo mes”. Recordando que el tiempo es un grado de dificultad añadido, por lo que debemos también ajustarlo a los recursos disponibles.

Descarga la tabla con la que trabajar tus objetivos SMART de hockey

Te proponemos que te sientes con tu equipo, ahora es un buen momento para discutir qué se quiere y puede conseguir tanto a nivel grupal como individual. Una vez te hayas descargado el archivo, ten en cuenta que para verlo con todas las funcionalidades has de abrirlo con Excel. Y recuerda que puedes añadir o eliminar tantas hojas como jugadores haya en tu equipo.